#CriticadeMiedo

A Ghost Waits

Atinada comedia independiente filmada en un sorprendente blanco y negro que entremezcla horror y romance con resultados más que discretos, que propone una suerte de modernización del clásico «El fantasma y la Sra. Muir (1947)» revirtiendo el género del fantasma y que desgraciadamente no saca todo el partido que podría obtener, a pesar del destacable trabajo interpretativo de su pareja protagonista. El nulo presupuesto y algunos defectos puramente técnicos, tampoco ayudan a elevar el conjunto.

Título original: A Ghost Waits (USA, 2020) Color, 80 mins.
Director: Adam Stovall
Reparto: MacLeod Andrews, Natalie Walker, Sydney Vollmer, Amanda Miller

★★✰✰

Las dificultades que pasan los cineastas independientes para sacar adelante sus proyectos se han visto reflejadas en infinidad de libros y documentales. El ingenio y el buen hacer artesano de los cineastas son las únicas cualidades que terminan por destacar en la miríada de producciones de bajo o nulo presupuesto que pululan por los festivales y plataformas de vídeo bajo demanda con la esperanza de servir como reclamo para más financiación y, evidentemente, una película mejor. A Ghost Waits es una de estas producciones, rodada en un sorprendente blanco y negro es una comedia de horror que cuenta la historia de un hombre solitario y taciturno que tiene que pasar unos días en el apartamento en el que está haciendo unas pequeñas reparaciones para su trabajo y que ha sido repentina y misteriosamente abandonado por sus inquilinos, para descubrir que se encuentra embrujado por el fantasma de una hermosa mujer.

La fusión de romance y horror no es nueva, ya funcionó con anterioridad en films tan variados como El fantasma y la Sra. Muir (1947) de Joseph L. Mankiewicz o la más contemporánea A Ghost Story (2017) , sin ser exactamente una historia de este tipo, A Ghost Waits propone un concepto extremadamente interesante y un fantástico estudio de personajes, donde el trabajo interpretativo de su pareja protagonista, más atinada Natalie Walker que MacLeod Andrews, destaca por encima de todos los demás elementos y los defectos técnicos provocados por la escasez de financiación.

Dirigida y escrita por el debutante Adam Stovall, A Ghost Waits está fotografiada en un blanco y negro luminoso por el director de fotografía Michael C. Potter, con una luz especial centrada exclusivamente en el personaje de Natalie Walker para enfatizar su palidez, incluso en las escenas con menos luz, confiriéndola una apariencia de otro mundo y añadir un tono surrealista a sus apariciones. Un acierto. Sin embargo, el resto del tiempo resulta demasiado anodina en términos de encuadre o composición.

En resumidas cuentas, una comedia de horror divertida, perspicaz y en ocasiones conmovedora, con pocos personajes y escasos ochenta minutos de duración, otro acierto, que resulta muy recomendable para aquellos aficionados que entienden las limitaciones del bajo presupuesto y no se limitan a buscar emociones fuertes y jump-scares cada medio minuto.