Título original: Anne Rice’s Mayfair Witches (USA, 2023–) Color, 8 episodes, 60 mins
Creador: Michelle Ashford, Esta Spalding
Reparto: Alexandra Daddario, Tongayi Chirisa, Jack Huston, Harry Hamlin
Después del éxito de Las Crónicas vampíricas, la renombrada autora estadounidense Anne Rice decide expandir su universo literario con una trilogía de novelas que se centra en una influyente familia de brujas de Nueva Orleans. Estos personajes se derivan de la séptima novela de las Crónicas. La primera novela, titulada La hora de las brujas (Barcelona: Ediciones B, 1990) en su edición en español, se convierte ahora en la base de una adaptación televisiva creada por Michelle Ashford y Esta Spalding para el canal de pago AMC+.
La serie, compuesta por una temporada de 8 episodios de una hora cada uno, se centra en una joven y ambiciosa neurocirujana (Alexandra Daddario). A medida que descubre sus habilidades extrasensoriales, también descubre que su madre biológica sigue viva y pertenece a una poderosa estirpe de brujas de Nueva Orleans. Decidida a conocer su pasado, se aventurará en la vibrante ciudad sureña, donde se enfrentará a una siniestra entidad que ha protegido a su familia a lo largo de generaciones.
De forzados amaneramientos de horror clásico, Las brujas de Mayfair se presenta como un insatisfactorio e insufrible melodrama gótico romántico, inspirado en las viejas novelas góticas de Ann Radcliffe, pero sumergido en la mediocridad que caracteriza a muchas producciones de terror mainstream. La serie intenta amplificar una historia femenina sobre tradiciones de brujería mediante golpes de efecto superficiales y escenas de body horror generadas digitalmente, mientras incorpora también elementos de La semilla del diablo (1968) y cualquier película que trate el tema de la persecución a las brujas durante la época colonial en América del Norte.
En este sentido, el guión de Las brujas de Mayfair presenta un mensaje de despertar y represión femenina, siguiendo la corriente woke predominante entre los guionistas contemporáneos norteamericanos. Sin embargo, el mensaje se trata de manera pueril y estereotipada, reflejado en los personajes opuestos a la protagonista, como el cirujano jefe que la infravalora y se niega a ingresar a su madre adoptiva en un ensayo clínico, o el oscuro patriarca Mayfair, interpretado por Harry Hamlin, empeñado en manipularla para su propio beneficio. Incluso las propias brujas del título se presentan como una típica cofradía femenina que realiza juramentos paganos de sumisión a un demonio aparentemente protector, cuyo atractivo es más bien tirando a cursi, en buena parte debido al escaso carisma Jack Huston.
A medida que avanzan los episodios, Las brujas de Mayfair se sumerge en clichés familiares, como la culpa por ser diferente, el temor a lo extraño o los conflictos derivados del peso de la tradición familiar. En especial pasan a primer plano las experiencias de la protagonista mientras se transforma en una mujer plenamente empoderada, que revoluciona su entorno en busca de sus raíces y escapar de la sumisión patriarcal que rige su vida actual. Alexandra Daddario interpreta una heredera del clan Mayfair, particularmente lastrada por manierismos interpretativos, incapaz de cargar sobre sus espaldas el peso de hacer interesante la serie. De hecho, a excepción de las veteranas Beth Grant y Annabeth Gish, el elenco de la serie de Michelle Ashford y Esta Spalding resulta anodino y sin brillo.
Presentada poco después del estreno de la adaptación de Entrevista con el vampiro crítica, es evidente que AMC+ ha buscado en el material original de Anne Rice un nuevo filón en el género fantaterrorífico. Qué duda cabe que el «Universo Inmortal» de Rice se presta a ello perfectamente. Al igual que su contraparte vampírica, Las brujas de Mayfair es una serie de ritmo pausado, llena de goticismo moderno, que se presta a la posibilidad de futuros crossovers. De hecho, en los primeros compases de Entrevista con el vampiro ya se hace una breve mención a la casa Mayfair y los misteriosos rumores sobre sus habitantes. Pero, a diferencia de ésta, la historia de Las brujas de Mayfair se siente demasiado vacía y alargada para su propio bien, sin generar un mínimo del suspense que se espera de una serie sobre brujas poderosas y la sociedad secreta Talamasca que las protege. Y que, ya que hablamos de tradiciones familiares, da menos miedo que un impuesto de sucesiones.